Aunque el propietario finalmente ha podido recuperar su propiedad, tendrá que realizar importantes obras de reparación, ya que los ocupantes ilegales han dejado la vivienda en un estado lamentable.
En Sanlúcar de Barrameda, en la provincia de Cádiz (Andalucía, sur de España), un propietario ha sido víctima de un increíble chantaje tras descubrir que su casa recién comprada estaba ocupada ilegalmente.
Según la información publicada por el sitio web de noticias español Okdiario, Carlos Caballero acababa de adquirir una vivienda de 250 m² con piscina el pasado mes de julio cuando se dio cuenta de que ya vivían allí dos personas. En lugar de abandonar el lugar, los ocupantes ilegales le exigieron 15 000 euros para marcharse. Ante su negativa, bajaron su demanda a 11 000 euros. «Era un chantaje puro y duro», confesó el propietario.
Los ocupantes ilegales, que parecían bien informados sobre sus derechos, intentaron justificar su presencia explicando que el procedimiento de desahucio podría durar varios años. «Me dijeron que tenían derechos y que yo no podría hacer nada durante mucho tiempo… Me sentí impotente», relata.
Sin embargo, el asunto dio un giro aún más surrealista: alertado por los vecinos, el propietario descubrió que los ocupantes ilegales intentaban vender la casa que ocupaban. La rápida intervención de la Guardia Civil permitió detener la transacción fraudulenta. Los dos individuos finalmente abandonaron el lugar sin obtener dinero.
Carlos Caballero pudo recuperar su propiedad en agosto. Sin embargo, tendrá que realizar importantes obras de reparación: paredes deterioradas, electrodomésticos robados y basura abandonada… La casa estaba en un estado deplorable.
